Las llamadas al negocio de reparación de vidrios de Alfred Morando en Palm Springs han sido frecuentes en las horas y días posteriores a la potente explosión en el exterior de una clínica de fertilidad que dañó casas, restaurantes, hoteles, un hospital y otros edificios, algunos de los cuales se encontraban a pocas cuadras del lugar de la explosión.
El lunes, las ventanas de muchos de esos edificios estaban cubiertas de paneles de madera, dos días después de que se rompieran por la fuerza de la explosión del coche en el estacionamiento de la clínica. El FBI estimó durante el fin de semana que el radio de la explosión se extendió por al menos 230 metros, aproximadamente dos campos y medio de fútbol americano, en la comunidad del condado de Riverside, a unos 160 kilómetros al este de Los Ángeles.
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MIRA AQUÍ GRATIS "En mi experiencia profesional, la onda expansiva de la bomba es lo que sacudió los edificios y destrozó las ventanas", declaró Morando, propietario de Executive Glass. "Ceden con la presión".
El coche bomba explotó en una zona habitualmente concurrida, con viviendas, el Centro Médico Regional del Desierto y negocios. Las ventanas del Hotel Velvet Rope estallaron a dos cuadras del lugar de la explosión.
"Vidrios rotos por todas partes. No creo que haya habido una sola habitación que no haya resultado dañada, desde las puertas hasta las ventanas y los aires acondicionados", dijo David Ríos, diseñador y propietario del hotel. "El techo, los condensadores (del aire acondicionado) también, y eso es metal. Con el impacto del coche, los escombros atravesaron la madera, el metal y las ventanas".
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SUSCRÍBETE El hotel lleva abierto aproximadamente un año, pero Ríos dijo que no está seguro de cuándo finalizarán las reparaciones. Hasta el domingo, al igual que muchos negocios afectados por la explosión, Ríos no tenía una fecha límite para la reapertura.
En un Denny's cercano en Palm Canyon Drive, los cristales rotos de las ventanas estaban esparcidos por los reservados, el suelo y las mesas del restaurante, algunos con desayunos a medio terminar en los platos.
Los residentes de la zona describieron la explosión como un trueno y una sensación similar a la de un terremoto. Residentes a entre media cuadra y media milla de distancia dijeron haber sentido la explosión.
"Nuestro complejo de apartamentos se movió hacia adelante y hacia atrás", dijo la residente Mary Espinoza.
Cuatro personas resultaron heridas en la explosión, que las autoridades consideraron un acto terrorista intencional. La explosión mató al hombre que detonó el explosivo, identificado por el FBI como Guy Bartkus, de 25 años, residente de Twentynine Palms. Varias fuentes policiales informaron a NBC4 Investigates que Bartkus tenía una prolífica presencia en línea, principalmente relacionada con videojuegos, pero también actividad que parece demostrar su interés en los explosivos, su creencia de que la Tierra necesita menos humanos y sus experimentos con drogas y dispositivos diseñados para quitarse la vida.
El auto estaba estacionado en un estacionamiento detrás del edificio de American Reproductive Centers cuando explotó alrededor de las 11 a.m. del sábado. La explosión rompió ventanas, dejó escombros esparcidos por la calle y generó confusión e incertidumbre en el vecindario.
En un comunicado emitido el sábado por la tarde, la clínica American Reproductive Centers informó que el vehículo explotó en el estacionamiento cercano al edificio de la clínica. Imágenes aéreas mostraron lo que parecía ser un auto destrozado en el estacionamiento, a pocos metros del edificio.
Ningún empleado resultó herido y el laboratorio, incluyendo óvulos, embriones y material reproductivo, se encontraba seguro y sin daños, según informó la clínica.
